Al igual que la novia cuida al máximo cada punto de su imagen, tanto los meses previos como el día de su boda, es importante que dedique máxima atención a su vestido. Un vestido de novia arrugado o con manchas por un mal cuidado, los días previos al enlace, puede llegar a causar gran desilusión para la protagonista. Para evitar todo tipo de imprevistos y que ese día luzcas espectacular, tanto tú como el diseño elegido antes de ser entregado en la tienda, te mostramos algunas claves.

Antes de la boda

Cuidados antes de la bodaLos momentos previos a la boda, cuando ya tenemos el vestido en nuestra casa a la espera de poder vestirlo el día clave, son totalmente decisivos. Debemos cuidar tanto el trato que le demos nosotras, como el resto de las personas que vivan en nuestra casa, especialmente en el caso de niños pequeños.

. Cuando la novia recoge el vestido de la tienda, éste es entregado totalmente impecable. En este punto, y cuando lo llevemos a casa deberemos mantenerlo colgado de los tirantes que vienen en el vestido especialmente para esto. De esta forma, evitaremos que otras partes del vestido pueden ser lastimadas o se produzcan cambios en su estructura original.

. No lo dejes dentro de una bolsa de plástico. Esto es porque las fibras naturales con las que está confeccionado el diseño muestran toda su belleza cuando respiran.

. En aquellos casos en los que el vestido tenga que ser planchado, no es el momento de arriesgarse, así que mándalo planchar a un centro especializado. Estas tiendas están especializadas y saben cómo tratar cada tejido, de forma que luzca impecable.

. Si tu boda es en la playa, trata de evitar que tu vestido sea de seda. El agua salada y la arena no son buena combinación y el vestido podría mancharse de forma irreversible.

El día de la boda

Cuidados el día de la boda

Ha llegado el gran día. Seguro que estarás entusiasmada al lucir tu traje, con un bonito peinado y maquillaje, y todos los complementos que has elegido expresamente para este momento.

. Los perfumes y desodorantes pueden crear manchas visibles en la ropa, así que intenta aplicarlos antes de colocarte el vestido. Igualmente, presta especial cuidado con el maquillaje.

. Es posible que durante el banquete o la posterior fiesta pueda caer sobre tu vestido algo de comida o bebida. Te recomendamos no aplicar ningún producto quitamanchas y tan sólo llevarlo a limpiar tan pronto te sea posible.

Después de la boda

Cuidados el día de la bodaComienza un nuevo día en tu vida, tras todo el ajetreo de la boda, el baile… Ha llegado el momento de comprobar el estado en el que se encuentra tu vestido, si lo quieres conservar. Es posible que hayas elegido un diseño confeccionado con tejidos delicados y que pueda tener incrustado algún strass u otro detalle que lo hace todavía más delicado.

. Si el día de tu boda estuvo marcado por la lluvia, seguro que el vestido se mojó. Te recomendamos que no lo guardes dentro de una bolsa de plástico.

. Como bien hemos dicho antes, si has celebrado tu boda en la playa y quieres conservar tu vestido en el mejor estado, llévalo cuanto antes a limpiar.

. Llevar el vestido a la tintorería, es algo totalmente imprescindible para eliminar las posibles manchas. Por ejemplo, las bebidas azucaradas o el sudor en un primer momento parecen invisibles, pero el paso del tiempo y el calor las harán aparecer. Otra de las manchas más comunes que suele darse es en los bajos del vestido y la cola. Al final del día, suelen presentar manchas grisáceas del roce con el suelo y su suciedad.

. Tras recoger el vestido totalmente limpio, la mejor opción es guardarlo en una caja de cartón resistente. Si has decidido dejarlo colgado, piensa que permanecer así durante mucho tiempo posiblemente acabaría deformándolo.

. No lo dejes en una bolsa de nylon, ni siquiera en la bolsa que te proporcionó la tienda, ya que no le permitirá respirar. Envolverlo en papel de seda absorberá la humedad.

Conservar el vestido de novia en buen estado no sólo te permitirá tener un grato recuerdo a lo largo de los años, sino que incluso, puedes cederlo a otra persona que lo necesite o si quieres reciclarlo puedes llevarlo a una modista para que te haga algún arreglo y poder utilizarlo para acudir a una fiesta.